A pesar de que anteriormente se creía que las tragaperras habían sido inventadas en el año 1860, ahora todo indica que si creación fue exactamente en el año 1895. El antecedente a estas máquinas, eran unas que se usaban en establecimientos de la ciudad de Nueva York. Los jugadores debían colocar 5 centavos en la ranura, con lo que ganaban el derecho de tirar una palanca. Al tirar la palanca, se movían unos tambores que contenían diez cartas de póquer, y de acuerdo a la jugada que salía, el jugador podía optar a un premio.

Estas fueron las precursoras de las máquinas tragaperras que surgirían para adueñarse de los casinos años más adelante. Fue para 1895, cuando un mecánico de coches de la ciudad San Francisco, California presentó al mundo su invención. Charles Fey, el hombre que inventó las tragaperras, diseño un mecanismo de tres tambores, y para que estos pudieran moverse se debía introducir una moneda y luego accionar la palanca.

Los tres tambores de la máquina de Fey contenían 5 símbolos cada una, una herradura de caballo, un diamante, unas espadas, un corazón y una campana de la libertad. Para que el jugador ganará, los tres tambores debían coincidir en la misma figura. El premio máximo para la fecha era de 50 centavos, y se obtenía cuando en los tres tambores coincidía la campana de la libertad.

El éxito de la Liberty Bell fue muy grande, en poco tiempo ya había imitaciones por todo el país. Destacando un fabricante de Chicago, conocido como Herbert Mills, que saco su máquina de nombre Operator Bell, a la que agrego un nuevo símbolo al juego; la fruta.

La irrupción de las tragaperras en los casinos

El éxito de las tragaperras fue tal que cuando el gánster Bugsy Siegel las introdujo en su casino de las vegas, lo hizo a manera de entretenimiento para acompañantes de jugadores. Pero pronto estas nuevas atracciones del casino empezaron a superar en ganancias a las mesas de casino.

Fue entonces, cuando se les dio un protagonismo más relevante a las máquinas tragaperras en los casinos de la ciudad. Muchos historiadores concuerdan en que fueron estás atracciones las que hicieron crecer a Las Vegas hasta llegar a lo que hoy conocemos.

Desde su introducción en los casinos, las tragaperras funcionaron de la misma forma, hasta inicios de la década de 1960. En esta época empezarían los cambios en las máquinas, a las cuales se les asignaría un sistema generador de números aleatorios, además de que los rodillos ya no se detendrían al mismo tiempo. Ahora los rodillos se iban deteniendo de izquierda a derecha de uno en uno. Dándole más tensión al momento, algo que los usuarios valoraron positivamente.

Luego aparecieron las tragaperras que incorporaron pantallas de video y ya no era necesario una palanca para hacer girar los rodillos.

Hoy en día la mayoría de las personas que juegan a las tragaperras lo hacen a través de los casinos online, donde estos juegos son totalmente computarizados. Pero cabe destacar que siguen generando la misma pasión.